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Niña de Los Guandules perdió su vida poco a poco, indefensa y sola
«La niña la vi con muchas quemaduras en la cara, en las manos, en las rodillitas, su barriguita y en las nalguitas», manifestó Maribel Sánchez, con la voz entrecortada

La vida de Emailing Coronado, de tan solo siete años, se apagó poco a poco sin que ella pudiera hacer nada, en una residencia del sector Los Guandules, del Distrito Nacional. La pequeña había sido entregada en custodia a su verduga, Yokeiry Coronado de la Cruz, por su madre biológica, hace aproximadamente cinco meses.
Según el testimonio de Jeider Montero Medina, pareja sentimental de Yokeiry, los maltratos progresivos hacia la menor, que se volvieron cada día más severos, comenzaron a manifestarse hace dos meses y medio.
Por su parte, vecinos del sector informaron que, días antes de la trágica muerte de Emailing, notaron actitudes sospechosas, ya que la tutora no permitía que nadie se acercara a la niña.
«La niña la vi con muchas quemaduras en la cara, en las manos, en las rodillitas, su barriguita y en las nalguitas», manifestó Maribel Sánchez, con la voz entrecortada.
La residente dijo también sentirse muy afectada y que nunca le pasó por la mente que Coronado de la Cruz fuera capaz de cometer un crimen tan atroz.
«Estoy muy consternada, mucha tristeza, porque no sé qué la llevó a ella a esa situación, porque era una muchacha trabajadora, humilde», pronunció.

Otra vecina, identificada como Ana Cedeño, agregó: «Nosotros no creíamos que realmente esa muchacha daba para eso, porque hacía mucho que ella vivía entre nosotros. Nosotros la veíamos pacífica, nosotros no creíamos que daba para eso, cuando a mí me dijeron eso ayer no dormí en toda la noche».
El cuerpo presenta múltiples signos de maltratos físicos y de barbarie
El acta preliminar de levantamiento de cadáver, emitida por un médico legista, confirma que la pequeña Emailing fue víctima de maltrato infantil y barbarie, mientras permanecía bajo custodia de la pareja que fue apresada el pasado sábado por gentes de la Policía Nacional, adscritos al Departamento de Investigación de Delitos Contra las Personas (Homicidios).
De igual forma, el informe detalla que el cuerpo de la menor presentaba golpes contusos, quemaduras y laceraciones en diversas partes, evidencias del sufrimiento que padeció antes de morir.

Mientras tanto, la Policía Nacional indicó que, en la fase inicial de las investigaciones, los oficiales actuantes, en coordinación con el Ministerio Público, levantaron diversas evidencias, algunas de las cuales fueron localizadas en teléfonos celulares.
Además, comunicó que el cuerpo de la niña fue trasladado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) para los estudios correspondientes.
Los acusados del crimen fueron presentados ante el Ministerio Público para responder por los cargos en la justicia.