Una misa de acción de gracias fue realizada en la catedral San Juan Bautista, provincia San Juan, por la puesta en libertad del transportista Arsenio Quevedo, así como por la pronta recuperación de la salud de este. La misma estuvo oficiada por el obispo de José Dolores Grullón Estrella.
Durante el desarrollo de la misa Quevedo manifestó no sentir ningún tipo de rencor en contra de quienes lo acusaban de crímenes que, según él, no cometió.
Se recuerda que recientemente el Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional descargó y dejó en libertad a Quevedo tras encontrarlo inocente de varios crímenes que este era acusado y por lo cual habría guardado tres años de prisión.