El magnate mexicano Carlos Slim juega partida de dominó en bar de Galicia, España, donde esta de vacaciones

Es la tercera visita que Slim hace al pueblo natal del empresario de origen gallego. Su última estancia en la mansión que la familia Vázquez Raña posee en Avión fue hace tres años y también coincidió en agosto. Desde que llegó, Carlos Slim se paseó por esta pequeña localidad del interior de Galicia como un paisano más, al lado de don Olegario, y sin perderse las partidas de dominó en uno de los bares más concurridos y con fama de tener buen marisco.

Los empresarios mexicanos Carlos Slim (izda.) y Olegario Vázquez Raña (dcha.), durante un paseo hoy por las callles de la localidad de Avión (Ourense)

Este martes por la tarde la partida se prolongó varias horas. Slim y Vázquez Raña compartieron mesa con otros dos amigos en el bar O Luar hasta pasadas las diez de la noche, donde no pudieron evitar a las cámaras que captaron a los dos empresarios en plena faena.

Slim Helú, de 77 años, posee una fortuna valorada en más de 50.000 millones de euros, según la última lista publicada por la revista Forbes. Este quedó tan satisfecho de su última visita a Avión que entonces comentó que su intención era comprarse un chalé en este pueblo. Según contó a la prensa el propio Vázquez Raña, su amigo quedó sorprendido de la tranquilidad de este pequeño Ayuntamiento, de la comida y el poder pasearse sin escolta para asistir a las romerías y verbenas de los pueblos vecinos.

Vázquez Raña, íntimo amigo de Slim, pasa largas estancias en Avión con su mujer María de los Ángeles Aldir con la que tiene tres hijos. Uno de ellos, Olegario, que ya figura en las listas de los hombres más ricos de México, dirige algunas sociedades del holding familiar como el Grupo Empresarial Ángeles, un conglomerado con intereses en el sector hotelero, medios de comunicación o la banca.

El empresario mexicano Carlos Slim junto al notario Daniel Goñi (2izda.), durante su recorrido por las calles de de Avión (Ourense).BRAIS LORENZO EFE

El municipio de Avión y su vecino Beariz, con poco más de la mitad de habitantes, son las dos localidades gallegas con el corazón dividido entre este lado del Atlántico y Latinoamérica. Gran cantidad de vecinos tuvieron que emigrar, en especial a México, y aproximadamente el 200% de la población nativa vive fuera la mayor parte del año. Unos cuantos se labraron una enorme fortuna y construyeron aquí, para sus vacaciones o su jubilación, lujosas viviendas que salvo en verano permanecen cerradas. Pero el paradigma, sobre todos ellos, es la familia Vázquez Raña.

Buena parte de los emigrados han expresado ya su deseo de enterrarse en Galicia cuando mueran. De ahí que el Ayuntamiento de Beariz aprobase recientemente la construcción de un cementerio municipal. En pocos días, recibió cientos de solicitudes de los vecinos que viven fuera de su tierra, principalmente en México.

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