Como suele ocurrir cada año, el comienzo de la campaña regular es la puesta de largo de los 30 equipos de las Grandes Ligas, con las esperanzas por las nubes, con todas las ilusiones intactas que se han generado en los últimos meses y con la certeza de que todas las franquicias, absolutamente todas, parten en igualdad de condiciones con idéntico récord: cero victorias y cero derrotas.
Es, a fin de cuentas, el fin de la travesía del desierto para los aficionados al pasatiempo nacional y el comienzo de una época que disfrutamos como pocos.
Por este motivo, hemos decidido señalaros varios aspectos a tener en cuenta para ver y disfrutar de esta fecha tan señalada y que sólo ocurre una vez al año.
1. Béisbol por los cuatro costados
Como ocurre en todas las temporadas, los 30 equipos de las Grandes Ligas echan a andar en la nueva campaña y lo hacen distribuyéndose a lo largo del tiempo y casi del espacio. Entre los tres encuentros ya disputados el domingo y los doce restantes por disputar a lo largo del lunes, todos habrán lucidos sus mejores galas ante su público, cubriendo una franja de tiempo que dura horas, horas y más horas entre estos dos días.
2. Los mejores pitchers en el mejor escenario posible
Como es el inicio del año, los equipos recurren a sus mejores armas y el arma principal para los equipos de béisbol es echar mano de su pitcher estrella para incrementar sus opciones de triunfo… con la salvedad de que el rival hace exactamente lo mismo. Por este motivo, ya hemos podido ver un Madison Bumgarner vs Zack Greinke en Arizona, un Jon Lester vs Carlos Martínez en St. Louis, un Masahiro Tanaka vs Chris Archer en Tampa o el menú que tenemos para el día de hoy, como un Julio Teherán vs Noah Syndergaard en Nueva York, un Gerrit Cole vs Rick Porcello en Boston, un Félix Hernández vs Dallas Keuchel en Houston… o un Clayton Kershaw que hará de anfitrión a Jhoulys Chacín en Los Ángeles.
3. El momento para justificar todas las promesas de pretemporada
Es un dato absolutamente mágico y es que muchos jugadores, por no decir todos, afirman al inicio de los entrenamientos primaverales que llegan en el mejor estado de forma de toda su vida. Nunca falla, pero hay ocasiones en las que esa declaración puede incluso tener su equivalente durante la temporada regular. Pensemos en Bryce Harper con sus ocho home runs en Florida, casi lo mismo de Greg Bird, el primera base de los Yankees, que ha destrozado la pelota, y tantos y tantos otros.
4. No es el momento de sobrerreaccionar
Existe el dicho que define el béisbol “como una maratón, no como un sprint” y, aunque sea una frase hecha repetida hasta la saciedad, no le falta razón. La campaña regular comprende 162 partidos y no hay que pulsar el botón del pánico… todavía.
No, Masahiro Tanaka no estará tan horrible durante 2017 como en su debut contra los Rays. Tampoco Gary Sánchez desperdiciará tantas oportunidades a lo largo del año. Ni los Giants tirarán por la borda todas las magistrales actuaciones de Madison Bumgarner con una pésima actuación de Mark Melancon… o eso quieren creer. Y aunque pueda parecer increíble, incluso los Chicago Cubs acabarán su campaña con un récord mejor del ritmo actual de 0-162. Es sólo un partido y hay que entenderlo de esa manera, por muy dolorosa que pueda llegar a ser una derrota.
5. Los grandes momentos que presenciaremos
Si también caracteriza algo el fin de esa interminable espera que hemos tenido todos los aficionados son los momentos impresionantes que ya hemos visto en los tres encuentros de la jornada inaugural: la brillantísima actuación de un Chris Archer recuperado para la causa o la confirmación de Carlos Martínez como pitcher de élite contra los Cubs… o Madison Bumgarner, que no sólo es un jabato sobre el montículo sino que es capaz de hacer algo que nunca habíamos visto en los 114 años de existencia de la competición tal como la conocemos hoy en día, sacando la pelota del campo en dos ocasiones, que es algo que nunca antes un pitcher abridor había logrado en el Opening Day.
