Los coordinadores del cargamento intentaron enviar en un bote un nuevo motor para corregir el fallo, y un electricista para reparar la avería por un daño en la “culata”.
La poca movilidad del barco y el no pedir ayuda, como es lo normal en estos casos, alertó a los agentes del Servicio de Guardacostas de los Estados Unidos que vigilan en el Mar Caribe, y llegaron hasta la embarcación.
Con la sospecha de que podría cargar drogas, camufleajada en el cargamento de combustibles que declaró la tripulación, el barco fue escoltado hasta el muelle de Puerto Plata.
En el lugar se le hizo una requisa, pero no se encontró nada, por lo que fue traslada hasta la base naval de Sans Souci, en Santo Domingo.
Una vez en el puerto de Sans Souci, miembros de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) conjuntamente con los procuradores fiscales Francis Soto y Manuel Aquino, siendo alrededor de las 5:05 de la tarde del 31 de diciembre 2017, ocuparon 75 sacos de nylon dentro de los cuales fue encontrada la droga, escondida en un compartimiento secreto del barco.
El reporte del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) arrojó que los 1,502 paquetes hallados en la referida embarcación tenían un peso total de mil quinientos setenta punto cuarenta y un (1,570.41) kilogramos de cocaína clorhidratada.
En el barco venían el venezolano José Quijada Salazar; los colombianos Silvio Ibarra Vega y Manuel Escobar Bolaños; el cubano Pedro Betancourt Tabio; el nicaragüense Joel Ponce Ordoñez, el hondureño Marbin Lambert Harry; los dominicanos Salvador Gómez Cuevas, Rene Cuesta Feliz, Fermín Samboy Cuevas, Damerides Gómez Saldaña, Elvis Langomas Medina y Teurison Valenzuela Samboy, quienes ya cumplen un año de prisión preventiva en la cárcel de La Victoria.
Por el caso se le conocería este domingo medida de coerción a Ernesto Bienvenido Guevara (Maconi), Dante Meraldo Medina y Dante Wilfredo Medina Ozuna.
Ya antes se le daba seguimiento cuando el Ministerio Público y la DNCD iniciaron hace varios meses una investigación que incluyó la escucha de al menos 50 llamadas telefónicas, labores de inteligencia, vigilancias electrónicas y seguimientos.
