La estrella política de Hipólito Mejía aparece cada vez más apagada a lo interno del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y en la opinión pública nacional debido a sus múltiples errores políticos y a su incapacidad para cultivar amistades y mantener los aliados. A ello se suma su marcado egocentrismo, factores que conjugados han ido erosionando su popularidad.
Hasta hace poco Hipólito Mejía era figura señera dentro del PRD, pero las contradicciones entre él y el ingeniero Miguel Vargas Maldonado, provocaron las condiciones apara que este lo expulsara del partido del “jacho prendío”, decisión que tuvo que aceptar luego de perder en el Tribunal Superior electoral sus alegatos contra lo dispuesto por la comisión de disciplina de dicho partido.
Aunque todavía no se nota, Hipólito no es ni la sombra de lo que era antes. El liderazgo en el PRM lo tiene Luis Abinader, percepción que es avalada por los cuadros que respaldan la candidatura presidencial de este último, y que en el pasado estuvieron identificados con “el guapo de Gurabo”.
Como muestra de lo dicho en el párrafo anterior baste esta muestra. Con Luis Abinader están Eligio Jáquez, la familia Sánchez Baret, Jose Rodríguez Solodevila, Orlando Jorge Mera…entre otras figuras notables que se marcharon del PRD.
La gente pensante del PRM no quiere ya estar con Hipólito debido a que se maneja como un caudillo, de forma medalaganria y se cree la última cocacola en el desierto por lo que le importa lo que piensen o puedan pensar sus seguidores, a quienes trata como “muchachos”.
Hipólito no tiene el apoyo de la juventud del PRM. No lo tiene porque esa juventud es incapaz de identificarse con él,pues no tiene ningún mensaje para ellos, que constituyen parte de la vanguardia de la juventud dominicana. Peor aun algunos jóvenes del PRM consideran que Hipólito los avergüenza y que no tiene condiciones políticas para enfrentarse al candidato del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), ya sea este Danilo o Leonel debido a que no tiene la preparación académica para debatir públicamente con ninguno de estos, que son políticos preparados y estudiosos.
De todos modos habrá que esperar los resultados de la convención presidencial que se proyecta al interior del partido referido, pues Hipólito está vivo y tiene un liderazgo muy importante en las filas de su partido. A pesar de ello en todas las encuestas Luis Abinader lo aventaja y eso es un indicador digno de tomar en cuenta a la hora de las evaluaciones, pues la política se nutre de realidades.
Aunque la política es una caja de sorpresa todo parece indicar que la estrella de Hipólito va en declive y que somos testigos del nacimiento de una nueva estrella política en la República Dominicana: Luis Abinader.
